El primer sarcófago (En la imagen a la izquierda y debajo de la torre) se construyó semanas después del accidente para impedir que la radioactividad se propagase por todos lados, y para ello murieron decenas de obreros durante la obra y miles más tarde gracias a los efectos de la radiación, pero el objetivo se cumplió. Ahora, casi 24 años después y con la urgencia de que el primer sarcófago ya tiene grietas por las que escapa la radiación letal, el segundo sarcófago aún no tiene ni los cimientos hechos y todo porque al parecer la radiación ambiental es superior a la esperada, lo que hace que se tengan que retrasar aún más los trabajos.
El proyecto del segundo sarcófago (en la imagen click para ampliar) será una obra de arte, segun sus creadores, 2 empresas francesas, que consiguieron en 2007 la licencia para construir el que se espera que sea el último sarcófago (por mucho tiempo) para albergar el caliente corazón del reactor 4. La bóveda del nuevo sarcófago es básicamente como veréis en la imagen superior, estará formada por arcos de acero y un metal que absorberá la radiación, pero del que todavía no se conoce el nombre y que envolverán el exterior de la primera estructura de confinamiento para que una vez todo esté montado poder desmantelar esta de manera segura. Desmontar el primer sarcófago es indispensable para poder en un futuro (muy, muy lejano) acceder al corazón del reactor 4 y poder retirar los restos radioactivos hasta una instalación capaz de soportar dicha carga.
Problemas para construir el nuevo sarcófago no faltan, desde la infernal radiación hasta problemas administrativos, el primero es básicamente que no se puede trabajar cerca de la central debido a la intensidad de la radioactividad, por lo que la nueva estructura de confinamiento debe ser construida a cierta distancia de la central, y ser llevada mediante un sistema de raíles hasta su posición. Los segundos son básicamente los recursos necesarios para construir este nuevo sarcófago dependen de ciertos elementos antiradiación que son muy caros y dependen del mercado para hacer el presupuesto, por lo que puede que el coste inicial del proyecto (432 millones de euros) aumente bastante por lo que los gobiernos implicados deben ponerse de acuerdo hasta donde son capaces de llegar para evitar lo que podría ser una tragedia si el primer sarcófago se desmorona totalmente.
Como datos curiosos, podemos ver en la segunda imagen que el nuevo sarcófago tendrá una altura de unos 100 metros (como las torres KIO) y 270 de ancho, pesará 18.000 toneladas (3 veces lo que pesa la torre Eiffel) y toda la estructura tendrá que recorrer unos 200 metros mediante raíles para ubicarse en posición. Una tarea nada sencilla pero que esperemos funcione tan bien como creen sus creadores, por que sino creo que Europa tiene un feo fututro radiactivo.
Un saludo y sed buen@s
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